A la hora de hablar de ciudad, tenemos que hablar de sus equipamientos, como son los centros cívicos, socioculturales, universidades populares o casa de cultura. Éstos pueden construir un espacio físico y simbólico desde el que impulsar los procesos de participación ciudadana orientados a la cohesión social y promover el sentido de pertenencia a la localidad.
Hablando en primer lugar de las Universidades populares, podemos decir, que tiene su origen en Dinamarca, y que fueron creadas ya que existía la necesidad de dotar de nuevos referentes sociales y culturales a gran parte de la población. En España se crearon con el objetivo de ser centros de convivencia y difusión cultural, constituidas por entidades públicas o privadas con la participación del Estado e implantadas en zonas suburbanas. Por tanto, los equipamientos de proximidad se constituyen como respuesta social, cultural y/o educativa en momentos de transformación profunda de las relaciones entre la comunidad y sus instituciones. Tiene tras grandes finalidades políticas: ofrecer servicios a la población, que sea entendida como una casa común en la que dar cabida a colectivos y entidades además de ser contenedor de iniciativas y proyectos. Y por último lugar contribuir a la construcción del tejido social.
Centrándonos ahora en los centros cívicos o culturales, podemos decir que son los referentes desde los que acercarse a las necesidades y demandas de la sociedad. Además, deben coordinar las acciones y proyectos que desarrollan para compartir recursos y servicios. Éstos, deben trabajar en red, para evitar el aislamiento y favorecer las relaciones profesionales pues así e puede dar un mejor uso y aprovechar mejor, el conocimiento de los grupos y de los equipos profesionales. Podemos decir, que en los municipios con una población superior a 100.000 habitantes, estos centros tienen un protagonismo compartido con las casa d cultura. Además cabe destacar, que los centros cívicos están en cada barrio para construirlo, acrecentar y mantener su res pública: deben comprender y asumir que la ciudad común es cosa suya; deben molestarse en hacerla posible cada día, desde sus aportaciones cívicas cotidianas; a partir de cada barrio, motivados pos sus propias organizaciones: las asocicaciones ciudadanas, que son públicas; de la gente asociada para algo importante; las asociaciones son líderes de calidad de vida espléndida.
Desde AlAroMa vemos importante que este tipos de centros de proximidad posea una programación intergeneracional, cooperando para ello con las distintas asociaciones, y que dicha programación combine los servicios estables de libre acceso individual, con las actividades grupales, y que estas actividades sean del interés de la población, pues así quizá la gente haga más uso de estos equipamientos que en muchas ciudades no tienen apenas afluencia de público, aunque en otras ciudades la población sí hace uso de ellos. Para dar a conocer y fomentar el uso de estos equipamientos, debe ser el propio Ayuntamiento de la localidad el que lo publicite, por ejemplo, haciendo uso de las nuevas tecnologías a través de su página web. Un ejemplo de esto lo tenemos en Sant Boi, concretamente con su centro "La Gralla", del cual os dejamos a continuación el enlace para que podáis visitarlo: http://www.santboi.cat/ImpASIA.nsf/ca-WebEquipament-BASE?ReadForm&Clau=Equipamiento03&Idioma=es&IdTE=TE06&IdEquip=99400288083
Referencias: Marí Ytarte, R. (2009): Ciudadanía y educación social. Contextos y espacios profesionales. Toledo, UCLM. pp. 180-194.
VV.VV.(2000): Centros cívicos y Servicios de proximidad. Vitoria, Xavide. 27-50/93-100
VV.VV.(2000): Centros cívicos y Servicios de proximidad. Vitoria, Xavide. 27-50/93-100
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