Continuando con la entrada anterior, podemos decir que la cultura es el contenido educativo de la Educación Social, y que existen tres dimensiones de la educación a la que todo ciudadano ha de poder acceder. Éstas son la dimensión ética y cultural, la científica y tecnológica y la económica y social.
En dicho texto, también aparecen "los siete saberes necesarios" para la educación del futuro:
1. Superar las cegueras del conocimiento: error e ilusión.
2. Enfrentarse a la complejidad.
3. Enseñar la condición humana.
4. Identidad terrenal.
5. Enfrentarse a las incertidumbres.
6. Enseñar la comprensión.
7. Ética del género humano.
Por lo tanto, la tarea educativa llevada de la mano del educador, se ocuparía de qué hace o qué le ocurre a un individuo, así como de ser la encargada de ofertar espacios culturales comunes y disponibles para el conjunto de la sociedad, en el que todos puedan transitar en condiciones de igualdad.
Debemos tener cuidado no cometer tres errores fundamentales. El primero de ellos es no encerrar la cultura en decir, no reducirla a contenidos y productos artísticos e intelectuales que han sido clasificados de "alta cultura". Otro error es establecer la diferenciación de los "niveles" de cultura, como cultura de élite, cultura popular o cultura de masas, ya que si lo hacemos estaremos creando nosotros mismos la exclusión, pues creamos itinerarios culturales diferenciados en función del supuesto "nivel cultural" de la población. Y el último de los errores nombrados, es sólo considerar como cultura, aquello que ha sido creado por las sociedades occidentales, restándole importancia, de este modo, a las producciones creadas por personas que no son artistas, pero que si hubiese sido creadas por éstos últimos si tendrán importancia. Para evitar esto, debemos reivindicar la pluralidad cultural del mundo y luchar por una educación que sea capaz de dar cuenta a esa diversidad.
Para concluir, podemos definir los contenidos de la cultura como:
- Legado cultural, artístico y patrimonio humano en todas las épocas y manifestaciones.
- Cultura social que emana de los derechos humanos, principios democráticos y los valores universales.
- Tradiciones culturales, costumbres y modos de hacer que han configurado la diversidad cultural y lingüística de los distintos pueblos y comunidades a lo largo de su historia.
- Actualidad del mundo tecnológico, científico y de la sociedad del conocimiento.
En este mismo texto, también aparecen las funciones y competencias del educador social, y como nos parecen de suma importancia, hemos creído conveniente plasmarlas en esta entrada. Podemos decir que han sido extraídas de los documentos profesionalizadores editados por ASEDES:
El educador social tiene como función el diseño, ejecución y evaluación de proyectos socioeducativos en diversos contextos sociales orientados al desarrollo de:
1. Actuaciones de contexto: acciones y tareas que se dirigen a crear espacios educativos, mejorarlos y dotarlos de recursos: promover la participación, favorecer la implementación de políticas sociales y culturales en el municipio y trabajar en la red de equipamientos socioculturales en sus diferentes niveles.
2. Actuaciones de mediación entre individuos, colectivos y el espacio social de referencia, favoreciendo la inclusión social e impulsando el acceso a la cultura de forma coordinada con entidades y asociaciones.
3. Actuaciones de formación y transición cultural: creación de procesos educativos y de formación que potencien el desarrollo individual y colectivo.
Generalizando, las funciones del educador social son:
1. Mediación social y cultural: movilizar los recursos de la propia comunidad para generar procesos de encuentro y colaboración entre instituciones, colectivos e individuos y promover el acceso a la educación y a la ciudadanía del conjunto de la población.
2. Formación cultual y artística: poner en marcha proyectos educativos y de formación relacionados con la difusión y la creación cultural e impulsar una oferta educativa diversificada y de calidad para todas las edades y sectores de la población.
3. Gestión de equipamientos socioculturales: diseñar y coordinar el trabajo de los diferentes equipamientos socioculturales de la ciudad y potenciar su trabajo en red.
4. Promoción de redes ciudadanas: favorecer la inclusión y la participación social, dando visibilidad a las iniciativas de colectivos y entidades locales, que les ayuden a su formación técnica y en el desarrollo de sus actividades. Además, establecer relación entre las diferentes instituciones del municipio promoviendo la colaboración entre ellas.
5. Desarrollo de proyectos educativos y culturales: coordinación y apoyo a la puesta en marcha de proyectos de acción local ene le campo educativo, promoción y valorización de los recursos y agentes culturales del municipio. Búsqueda de recursos humanos y materiales para ala realización de proyectos.
6. Articulación de lo local y global: facilitador de conocimientos, información y recursos para el municipio y sus entidades.
7. Proyección cultural de la ciudad: favorecer la visibilidad cultural y turística del municipio a través de la realización de proyectos culturales y coordinando la actuación de artistas locales y amateurs para su promoción y realización artística y cultural en el exterior.
Referencia: Marí Ytarte, R. (2009): Ciudadanía y educación social. Contextos y espacios profesionales. Toledo, UCLM. pp. 171-180.